Este libro describe la práctica del Zazén con una claridad y sencillez inusuales. Los numerosos ejemplos de la vida cotidiana a los que recurre el maestro Uchiyama demuestran que el zen, lejos de tratarse de un camino ultramundano, consiste en descubrir con honestidad quiénes somos y desarrollar todo nuestro potencial en las actividades cotidianas. Las claves están en lo que el autor describe como el regreso a una experiencia anterior a las elaboraciones mentales –que nos impiden vivir la vida en toda su dimensión– y la confianza en nuestro ser íntimo, más allá de las complicaciones y las competencias. Además de explicaciones sobre la postura y las bases de la meditación, esta obra incluye el famoso discurso de despedida como abad del templo de Antaiji, en el que Uchiyama sintetiza su experiencia y sus enseñanzas. Un gran libro para el practicante budista y especialmente para quienes aún no han encontrado un maestro zen.