En el Sutra Shurangama el Buda platica con 25 sabios y bodhisattvas sobre sus prácticas de contemplación. Puesto que todos han logrado la Iluminación, le pregunta a cada uno la que considera la práctica más útil para despertarse. Todos explican el medio hábil que habían usado. El último en opinar es Avalokiteshvara, el bodhisattva de la compasión, el que cuenta cómo había sido instruido por un Buda anterior, el que se llamaba también Avalokiteshvara, quien le enseñó cómo usar el órgano del oído para iluminarse.